Ante tanta obsesión con el inglés, no hace falta que recurra a mis amigos británicos para escuchar dicha lengua. Todo el mundo se presta a ello, inglés until in the soup (Silvia, del blog “A pie de página”, dixit). Y claro, donde hay extranjeros hablando idiomas hay gazapos: son condición sine qua non.
Le voy a enseñar la ciudad a mis primos de Soria fue traducida el otro día por una amiga como I am going to teach the city to my cousins from Soria: digo yo que como es maestrica, utiliza el verbo “to teach” para todo, ya que se pasa el día dando lecciones.
Una colega que quiere practicar y que se lanza cada vez que está conmigo me contaba que su novio, ucraniano de Odessa, le había dejado por la que ella llama sin cortarse the presumed rat . Y que, siguiendo con lo de cortar, el mozo le había cortado el teléfono mientras, sin ni siquiera haberse reconciliado previamente, tenían sexo telefónico: he cut the telephone during cell sex. Espero que, al menos, haya cortado el celular en trocitos iguales y entonces se convirtiese la llamada en lo era: safe sex. En fin, que aquí no hay quien entienda nada.