Un método peligroso

No soy psicóloga. Ni psiquiatra. Sí soy, sin embargo, una apasionada de Jung. Y una lectora curiosa.
En una época en que yo coleccionaba mis sueños, anotándolos todas las mañanas, descubrí el libro autobiográfico «Recuerdos, sueños, pensamientos». Me interesó lo que decía y, siguiéndole la pista, me adentré en Freud. No pude con él: se me hizo pesado, aburrido. Retorné a Jung, a través de la lectura de analistas jungianas: C.P. Estés, Shinoda Bolen, Alice Miller, Marion Woodman.
El título de la película refleja la dificultad de no crear lazos con el paciente.
La película logra el no fácil equilibrio de narrar la historia personal y profesional de Jung sin caer en el morbo ni regodearse en tecnicismos. Deja claro que el psicoanálisis es un método que funciona: la paciente Sabina Speilrein logra superar su pasado y doctorarse en medicina, concretamente en psiquiatría. También señala los motivos de la disputa entre Jung y Freud, debida al énfasis en lo sexual por parte de este último y en las coincidencias, casualidades y premoniciones por parte de Jung.
Magníficamente ambientada, tiene una música bella y una fotografía espléndida. El trabajo de los tres actores principales ( en especial Viggo Mortensen) le da fuerza y calidad.

21 Respuestas a “Un método peligroso

  1. Nunca pensé en coleccionar mis sueños anotándolos, y habría sido una curiosa y bonita iniciativa. Hoy día no sueño tanto o no lo recuerdo, aunque todavía me viene a la memoria algunos que tuve hace muchos años por lo curioso y divertidos que fueron.

    • Me regalaron una enciclopedia para aprender a interpretarlos, y leí sobre símbolos, mitos, sueños. Creo que tengo una docena de libretas, todas preciosas por cierto, ya que los amigos se enteraron y ,en cuanto acababa un cuaderno, me traían otro.
      Fue realmente sorprendente lo que descubrí. Y, cada vez que los releo, entreveo una temática común y muchos subtemas. Realmente fascinante.
      Ahora también me pasa un poco como a tí: que casi no los recuerdo.
      Una técnica para «llamarlos» es tener una libreta y un boli en la mesita de noche, para anotar lo que recuerdes nada más despertarte. Notarás cómo, a medida que escribes, vas recordando cada vez más.

  2. El tema de la interpretación de los sueños me interesa poco. Me pasó lo que a ti: Freud seduce, pero no sé si será la traducción o que no era un buen escritor, pero a mí me ha parecido siempre aburrido. Y eso que le damos un plus de interés que otros no tienen.

    Voy a ver si convenzo a GreenEyes para que me acompañe a verla, que tengo ganas. Además, cuando uno no encuentra chica le susurra el nombre de Viggo Mortensen y va segura. tengo buenas referencias de la peli; ahora más.

    • La interpretación de los sueños es algo muy interesante: es como adentrarse en otro mundo, lleno de tesoros, como nadar bajo el mar.
      Ya me dices qué te pareció. Yo creo que es buena, visualmente perfecta y asequible al público no especialista pero mediamente cultivado.
      Es que Viggo Mortensen es mucho Viggo…¡Qué envidia me da la Ariadna Gil!!!!.
      Bueno, creo que le dedicaré un Masculino singular, para resarcirme: el chico se lo merece.

  3. Interesante película para la lista. Respecto a los sueños, cuando son intensos, yo también los anoto. Aunque pienso que debería anotar todos los que recuerde al despertar. Realmente, es como si viviéramos dos vidas diferentes y unidas al mismo tiempo. Una a continuación de la otra, en una secuencia cíclica.

    • Sí, es mejor anotarlos todos, darles un título incluso, aunque sean muy breves los recuerdos que nos haya dejado. Luego, cuando los leas, te sorprenderás. Es todo un descubrimiento, inquietante y bello a la vez.
      Estoy de acuerdo con lo que dices: es como si viviéramos dos vidas que se intercalan.

  4. El problema de la ciencia es insinuar que la vida se puede vivir sin establecer vínculos. Hay vínculos entre paciente y siquiatra, entre una bacteria y el microbiólogo, inclusive entre los paradigmas y el orador. De lo contrario, nadie defendería, eso mal llamado «ciencia».

    • Sí, es cierto. Es humano establecer vínculos. Pero el problema surge cuando se traspasa una barrera y no se sigue el código ético que el médico, o el psicólogo juraron previamente al ejercicio de su profesión.
      Aquí Sabina se ve obligada a cambiar de terapeuta. Y aparecen en la película varios posicionamientos: Otto Gross, que defiende dar libertad total a los deseos, Jung, que sufre las contradicciones entre lo que siente y lo que hace, y Freud, que intenta comprender la naturaleza humana en base a la fuerza que el sexo ejerce sobre ella.
      Ufff, ¡menudo rollo te he soltado!!!. Espero no haber metido mucho la pata.

  5. ::: La he visto. Me esperaba más.

    Yo sé un poco de Freud, sólo un poco. De Jung, casi nada. Pero si un cineasta se atreve con un tema “sagrado” –y éste lo es, pues independientemente de lo cuestionado y cuestionable del psicoanálisis, no sólo ha cruzado las ciencias humanas y el arte del Siglo XX, sino que ha impregnado hasta nuestro lenguaje coloquial-, si se atreve, decía, debe arriesgar.

    Y se ha limitado a hacer una peli correcta. Sin más.

    Buenas interpretaciones (no es el mejor Viggo ni de cerca, pues aunque el maquillaje es magnífico, el actor hace lo que puede con un personaje al que no ayuda el guión), ambientación elegante y cuidada, también algunos diálogos (barre para Freud en detrimento de Jung).

    Lo mejor para mí es que me descubre dos personajes que desconocía (no me refiero a Freud y a Jung).

    Atticus, sólo si no tienes otra que ver, pues es un poquitico maniquea y flux.

    :::

  6. Yo creo que ante la dificultad del tema, Cronemberg lo ha sabido llevar.
    Se arriesga al revelar la relación entre Jung y Sabina, que para la época supongo fue un escándalo y ni el mismo Jung se atrevió a tocar en su biografía.
    Para mí Viggo lo hace bien, ya que el personaje de Freud daba, como dices, poco juego.
    Los dos descubrimientos que señalas son, supongo, Otto Gross y Speilrein.
    Bueno, tan maniquea tampoco es. Yo no vi esa barrida tan clara. Al patriarcal Freud lo pinta asentado en su mundo y, en cambio a Jung, lleno de contradicciones y planteamientos, más científico y humano.
    Aquí, ya lo he dicho más de una vez, soy poco objetiva. Porque pongo sólo las pelis que realmente me gustan. Y ésta es una.
    Si Atticus la ve ya nos contará, espero.

  7. Flux. O sea.

    Pues era una de las elegidas, pero anoche fuimos a ver… «Un dios salvaje». Y vaya. Mucho Polanski, mucha interpretación deslumbrante, pero yo sólo vi una película delirante (mejor: una obra de teatro filmada) con unas interpretaciones histéricas a las que colabora un chillón doblaje.

    Pero caerá la de los buceadores de la conciencia.

  8. La de Polanski no me apetecía mucho, aunque he oído de todo. El teatro me gusta verlo en escena, no filmado. Y Polanski es especial: no estoy para él últimamente.
    Me gusta esa expresión que has usado «buceadores de la conciencia». Para mí, una buena película: ya ves que no coincido con CrisC, que la ve flojucha.

  9. No entiendo absolutamente nada de psiquiatría, pero de psiquipersonas me atrevo a hablar, vi la peli, y estoy con Jung, me encantó como el dire enfocó su profesionalidad, y además es guapo, que también ayuda. Estar con un atractivo médico mmmm, y cada cual que opine lo que quiera, lo importante es el fin para conseguir la sanación mental (difícil de saber tb cual es el punto óptimo y el mejor remedio).
    Freud/Viggo, perfecta simbiosis para que me lo cuelen, si tuviese uno así cerca seguro que iría, aunque tuviese que inventarme los sueños.
    Un abrazo.

    • Jajaja…Svenska:¡ pareces la leona de la Metro!!!!!!!
      Ya me explicarás qué es eso de «psiquipersonas»…
      Creo que hoy en día el psicoanálisis está un poco obsoleto, aunque aún hay quien lo sigue practicando. Yo siempre he oído que, aunque largo, es efectivo. Pero no va con todas las dolencias, ni con todas las personas.
      Michael Fassbender es un descubrimiento de guapo. En «Jane Eyre» también actúa, está un poco de moda, y me encanta: ambientada en Inglaterra, paisajes, historia de la escritora…No me la pienso perder, aunque haya visto otras versiones.
      Viggo/Freud…dices que te lo colarían. Y a mí. Y a muchas. Ahora mismo le subo un post ( de esos de sólo imagen, y con el pelito largo…mmm)
      Besos

  10. Yo me apunto a ver «Un método peligroso» pues aunque no he leido nada de Freud ni de Jung se que siempre aciertas con tus sugerencias. Por supuesto no me quiero perder Jane Eyre a ser posible en versión original.¿Te apuntas?.

  11. Gracias, Karmen. Son mis opiniones, no pretendo hacer un análisis de las películas, sólo decir el porqué las incluyo en mi grupo de favoritas.
    Me apunto, pero espera unos días, que ahora estoy con exceso de trabajo y no tengo ni un minuto (casi) libre. Pero quedamos, ¿eh?

  12. Estuve el viernes. Esto… qué aburrimiento. La ambientación, el maquillaje, la fotografía… eso que suele decirse cuando no se tiene nada más que decir, esto es, cuando hablamos de una peli fallida o directamente mala. Jung, vale, aceptable. Freud, sólo correcto. Y la paciente/psiquiatra, directamente delirante, histeroide, poco creíble. Acabó la película sin que yo supiera si me contaban una historia de amor, una cronología del psicoanálisis o un enfrentamiento poco comprensible entre esos dos genios.

    Lo siento, pero no. No me la tragué. No entré. No es una buena película (siendo generoso).

  13. Bueno,entonces tampoco coincidimos. No pasa nada.
    No creo que el papel de la paciente sea fácil y ,en cambio, a mí me resultó creíble.
    La historia, un poco de las tres cosas que mencionas, una biografía de Jung.

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